Un gran contraste que presentamos, un antiguo libro (que algunos conocimos) versus el nuevo idioma que invade nuestra sociedad, el lenguaje XAT y otros igual de nefastos.
Acá no se trata de ser "intolerantes", ni de tener aires de protectores de la lengua Española, ya que es un idioma tan RICO y COMPLEJO que al poseer tantas variantes y reglas, es mucho mas complicado ocuparlo en su totalidad, en comparación con otras lenguas.
Sin embargo, y no hace falta llamar al profesor Banderas para que nos apoye, hoy en día vivimos tiempos en que todo el aparataje de los poderosos, en su afán de idiotizar a la juventud por medio de las "tribus urbanas" y otras degeneraciones, también han enfocado su blanco en otra área, el lenguaje.
Ya no es novedad que la mayoría de las conversaciones ocupen lenguaje xat y se acorten las palabras deliberadamente, creando una verdadera subcultura infinitamente mas pobre; esto sumado a que en nuestro sistema educativo NO SE FOMENTA LA LECTURA, de tal manera que la inmensa mayoría de las personas egresa de su educación sin poseer una verdadera comprensión de lectura. Cada día los chilenos hablamos y nos expresamos peor, carecemos de una gama decente de sinónimos y antónimos y ya parece una tarea titánica hacer que un joven lea un libro o de a entender lo que piensa por escrito. Increiblemente, y frente a este sombrio escenario, debemos sumar la nefasta campaña por fomentar pseudolenguajes que solo empobrecen a las mentes de quienes lo utilizan.
El empobrecer nuestro idioma solo trae consecuencias negativas, al manejarlo cada vez menos se pierde la capacidad de expresarse, sin expresarse correctamente surgen los conflictos y el desinterés por adquirir mayor información, se crea un rechazo a la lectura, fuente de conocimientos por excelencia, y por ende el embrutecimiento y la reducción de la capacidad de pensar y analizar.
El fondo de todo esto es transformar a los jóvenes en bestias consumidoras, totalmente ignorantes de su entorno, carentes de valores, pero por sobre todo, idiotas, incapaces de pensar y expresarse por si mismos.
Como Nacionalsocialistas debemos defender nuestra lengua tratando de utilizarla lo mejor posible dentro de toda su complejidad.