NO CLAUDICAR

Camaradas:

A través de todos los años que vamos interiorizándonos en el mundo del Nacionalsocialismo, es impresionante la cantidad de organizaciones, webs, clanes, etc que son un mero suspiro en el tiempo; muchos parten con las mejores intenciones, pero ya sea el mismo sistema de vida contra el cual luchamos, la falta de apoyo, el descompromiso u otras razones x, que a la larga muchos terminan varando en el camino.

Ciertamente, a todos nos faltan años luz para poder tener un ápice de la fuerza, voluntad y conocimientos de todos aquellos que forjaron el III Reich, y no podemos pretender siquiera comparar los mezquinos logros de la posguerra con lo que fue el regimen del Fuhrer. Pero no todo está perdido, si creyera aquello no estaría escribiendo estas líneas, las cuales son inspiradas en mi amada patria y en la REAL esperanza de un futuro triunfo de nuestras ideas por sobre la maldad de este mundo. Es justamente buscar despertar esas mentes dormidas lo que hará posible nuestro triunfo final, desconectar a las personas de esta realidad mediocre, chanta, ORDINARIA en la que vivimos, para que miren dentro de sí, y encuentren ese orgullo y energía vital que les ha sido extraviada desde pequeños.

Me da pena ver que tantas buenas intenciones en torno al NS terminen en el corto tiempo, no faltan los conventillos y pelambres de la peor calaña que solo colaboran con nuestros enemigos, que nos lleva a la desunión, a las rencillas idiotas y a esos orgullos nocivos.

Me gustaría creer, que no es la falta de "logros" lo que desmotive a muchos camaradas, porque estos solamente vendrán después de años, décadas de perseverar en algún objetivo relacionado con nuestras creencias. No hay que rendirse, no se debe claudicar cuando se trata de Nacionalsocialismo, no es algo que se deba abandonar como una moda pasajera, ya que esto claramente va mas allá de ser un ideal político, sino no has entendido nada.

Cuando se acaba un movimiento NS, como ya les ha ocurrido a tantos, no se debe abandonar la lucha, no se puede apartar el camino a que esta revolución conduce; se debe seguir luchando, internamente, contra el peor de los enemigos que siempre será uno mismo, la imagen sionista que a todos nos han creado de nuestro ser. El conocimiento, la pureza física y mental, el fortalecimiento del cuerpo y el espíritu, el derrotarse a uno mismo; todo aquello es parte vital del camino a seguir.

No claudiquemos jamás, y recordemos siempre, que podemos hacer mucho más de lo que pensamos, que nuestra voluntad nos mueva y nos haga fuertes.