Nuestro planeta, fuente primigenia de la vida, nuestro hogar durante toda la historia de la humanidad y nuestra morada una vez que el cuerpo muera. Si presentaramos solo estos antecedentes nadie dudaría ni un instante acerca de la naturaleza sagrada que debería revestir la madre tierra; y ese pensamiento fue una constante durante milenios, hasta que, los enemigos de la humanidad pervirtieron la sacralidad que siempre tuvo, y la transformaron en un gran paquete de recursos.
No fue hasta el siglo XX que la explotación indiscriminada de los recursos naturales se tornó en una constante de todas las naciones y como un camino a seguir para el anhelado "desarrollo", (tomando en cuenta que para el capitalismo, desarrollo equivale a automóviles, televisores, celulares, etc), pero mas alla de ocupar ciertos recursos, se nos formó una mentalidad "utilitarista" frente a los recursos naturales, transformando la antigua sacralidad, de quien nos daba comida, abrigo, alimentos, etc a no menos que una despensa gigante.
Todo esto se acentuó desde el triunfo de los enemigos de la humanidad en la segunda Guerra Mundial, donde las visiones de desprecio por la madre tierra, la ecología, flora y fauna de nuestro planeta, triunfaron por sobre una visión que luchaba por vivir acorde como lo indican las leyes naturales.
No hay que dejar de recordar, que fue el III REICH el gran defensor de la madre tierra durante el siglo pasado, que durante su corto y grandioso regimen se dictaron numerosas leyes en defensa de la naturaleza; sin embargo, el mayor aporte es dejar de ver esttas temáticas como algo ajeno a nuestra humanidad, sino que percibir nuestro entorno como algo mas grande que nos acoge y del cual somos parte. La necesidad de fauna, del bosque, de una vida sana y fuerte, de entender cual es el verdadero rol de la madre tierra, etc.
Hoy en día, en un mundo al borde del abismo, donde nos han conducido los vencedores de la segunda guerra mundial, los crueles amos de la humanidad, somos testigos de la destrucción de la tierra a un ritmo vertiginoso, ¿pereceremos nosotros como especie o transformaremos el planeta en un sitio yermo e inhabitable? los científicos no se pueden poner de acuerdo en aquello y es bastante difícil poder hacer una predicción concreta, pero lo cierto es, que bajo este camino no hay ninguna esperanza para nuestros hijos.
Frente a ese escenario, surgen populismos baratos que se alzan como paladines de la ecología, grupos de izquierda, hippientos inertes y otros mas decadentes aún, utilizan símbolos neomarxistas para predicar el respeto por la ecología, ¿con qué moral? que contrariedad mas grande, ver banderas de quienes, junto al capitalismo occidental, casi destruyen al mundo y han producido mas daño a nuestra tierra que en miles de años de polución. Chavacanerías surgen bajo este panorama, "la hora del mundo", ahorra luz, etc ser derrochador e indolente siempre es nefasto, pero debemos ser claros y tajantes... absolutamente ninguna de esas campañas es una respuesta seria frente a los problemas del cambio climático, la polución y la destrucción de los recursos.
¿Cual es la respuesta frente a esta actual crisis? aunque a muchos les duela o se niegen ante la verdad, el ÚNICO CAMINO para poder salvar a nuestro planeta es la vía del NacionalSocialismo, tan solo a través del respeto a la madre tierra, de vivir acorde a sus máximas, de cambiar nuestra percepción y como consecuencia de ello modificar las estructuras sociales y económicas.
No olviden nunca, que la Segunda Guerra Mundial nunca fue la guerra de Alemania v/s otras naciones, fue la guerra de 2 visiones que chocaron, la guerra de la madre tierra v/s el capitalismo, la guerra de las leyes naturales v/s las leyes económicas, la guerra de lo natural y bello v/s lo material y decadente.
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