Con gran publicidad y pompa se promociona la futura “ley anti-discriminación” que se tramita en el congreso nacional. Este proyecto de ley ha sido promovido por agrupaciones de homosexuales, travestis, inmigrantes y toda clase de minorías; esto con el objetivo de terminar con todo tipo de marginaciones, abusos y posibles prejuicios que tiendan a malograr la calidad de vida de tales, tal interés puede parecer comprensible y hasta justo, si nos ponemos en el plano de quienes son víctimas de segregaciones y persecuciones ideológicas. Sin embargo, no todo es tan claro y simple como lo quieren hacer señalar los señores diputados y senadores.
El asunto es que ya existe legislación que protege a estas personas, ya existen normas legales y constitucionales que les amparan en igualdad de derechos y protección a éstos y a su honra. Y si ya existe un ordenamiento jurídico que garantiza la igualdad de estas personas ante la ley, ¿Cuál es el verdadero motivo para querer legislar en especial este tema? Pues bien, aunque cueste creerlo, lo que se busca es lograr la total impunidad de estas personas en la sociedad chilena, es violar todos los principios legales y constitucionales que prohíben una clase privilegiada, una clase que goce de un estatus especial por sobre el común de las personas; creo que todos los chilenos estamos en desacuerdo que un grupo de personas, solo por ser gay o inmigrante gocen de privilegios especiales a los cuales no tenemos acceso el común de los chilenos.
¿En qué consiste el espíritu de esta ley? Más allá de todos los meses que los medios de prensa inventaron, mintieron y dieron como bombo en fiesta al tema de los malvados “neonazis”, estas personas lograron su objetivo, presentarse como las pobres víctimas de esta sociedad, como los oprimidos y los marginados. En medio de este manipulado ambiente, se fraguó maquiavélicamente el espíritu de esta ley, y se tomó cartas para extender su alcance más allá de lo comprensible; en un tiempo no muy lejano:
-No podrán ser despedidos de sus trabajos, por muy mal que realicen sus labores, argumentando xenofobia o racismo.
-No se les podrá excluir a la hora de contratar, por las mismas razones.
-No se les podrá evaluar mal en cualquier ámbito.
-Tendrán que haber personas como estas en organismos públicos, sin tomar en cuenta su idoneidad, solo por el hecho de ser Gay.
-Serán rostros de campañas solo por su condición o nacionalidad, etc
Es importante destacar, y dejar en claro que estas ideas son sustentadas y apoyadas por TODOS LOS SECTORES de nuestra política, Alianza, Concertación y neomarxistas abogan por una misma causa.
Ahora bien, invirtamos los papeles, ¿Qué sucedería si un grupo de travestis atacan y dejan mal herida a persona, o que abusen de él sexualmente? (lo cual sucede mucho mas seguido de lo que la intervenida prensa informa). Lo más seguro es que todo quedaría en nada, en que saldrían a chillar todos los representantes del marxismo que se está persiguiendo a los travestis, saldrían los representantes del oficialismo y la oposición anunciando investigación, una legislación a largo plazo, etc; pero ¿qué sucedería si alguien agrede O SE DEFIENDE de un travesti? En ese caso caerían las penas del infierno, ya que se estaría atentando contra la nueva nobleza de nuestro país, y después se culparía a nosotros por provocar al odio, etc.
Cuanta inmoralidad, hipocresía y estupidez hay en todo esto, ¿cómo es posible que estas personas vayan a gozar de privilegios?, ¿Acaso el trabajador que debe levantarse a las 6 de la mañana es protegido de igual manera por las autoridades?, ¿acaso el estudiante que no puede pagar la Universidad es apoyado por el Fisco?, ¿Acaso la persona que no desea comercio sexual en la esquina de su casa, fornicando frente a sus ojos, no tiene derecho a un ambiente digno y seguro?
CHILENOS, NO CAIGAN EN LOS ENGAÑOS Y LAS MENTIRAS DE LOS POLÍTICOS, ya llegará el día en que los privilegiados serán los chilenos que desean surgir.
A continuación un fragmento de la constitución que pretenden violar los “honorables del congreso”:
CAPITULO III DE LOS DERECHOS Y DEBERES CONSTITUCIONALES
ART 19.-LA CONSTITUCIÓN ASEGURA A TODAS LAS PERSONAS:
2º.- La igualdad ante la ley. En Chile no hay persona ni grupo privilegiados. En Chile no hay esclavos y el que pise su territorio queda libre. Hombres y mujeres son iguales ante la ley.
Ni la ley ni autoridad alguna podrán establecer diferencias arbitrarias;
3º.- La igual protección de la ley en el ejercicio de sus derechos.
12º.- La libertad de emitir opinión y la de informar, sin censura previa, en cualquier forma y por cualquier medio, sin perjuicio de responder de los delitos y abusos que se cometan en el ejercicio de estas libertades, en conformidad a la ley, la que deberá ser de quórum calificado.
16º.- La libertad de trabajo y su protección.
Toda persona tiene derecho a la libre contratación y a la libre elección del trabajo con una justa retribución.
Se prohíbe cualquiera discriminación que no se base en la capacidad o idoneidad personal, sin perjuicio de que la ley pueda exigir la nacionalidad chilena o límites de edad para determinados casos.
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